Además del estudio de los procesos de desarrollo cognitivo (durante todas las etapas de la vida del individuo), la Psicopedagogía tiene tres objetivos prioritarios dentro de la práctica educativa: la prevención, la detección y la intervención en los problemas de aprendizaje del individuo. Y no solo está enfocada en atender a los alumnos con necesidades especiales; también a aquellos estudiantes que muestran un bajo rendimiento escolar, tienen dificultades puntuales en determinadas áreas académicas, manifiestan conductas inadecuadas dentro del aula o problemas de integración.
Para saber abordar los problemas de aprendizaje, la Psicopedagogía, además, ofrece a sus profesionales un amplio abanico de técnicas de evaluación: desde las bases para observación empírica y formularios y entrevistas, hasta la aplicación de pruebas psicométricas y cuestionarios con el fin de detectar posibles dificultades o trastornos del aprendizaje y del desarrollo.
La Psicopedagogía ofrece los recursos necesarios para la intervención y el desarrollo de programas que atiendan las dificultades de aprendizaje y desarrollo de las personas: desde llevar a cabo evaluaciones psicopedagógicas, Neurocognitivas, y adaptar currículos, hasta ofrecer actividades y contenidos idóneos para cada caso personalizado.